Gatos que parecen tigres en casa, es lo que muchos buscamos.

No es un misterio para nadie que los gatos en general, independientemente de su tamaño o hábitat, tengan características muy similares.

Las características físicas, los ojos, las piernas, los bigotes y los rasgos de los felinos son prácticamente los mismos.

Podemos encontrar grandes instintos y hábitos que los hacen únicos y especiales comparados a otras especies.

Hablando específicamente de gatos que parecen tigres pero son domésticos, es muy notable su comportamiento tan arraigado.

Todavía conservan a sus antepasados o nietos salvajes; y no en vano.

Según una publicación de la revista «Nature Communications», los tigres siberianos y los gatos domésticos comparten el 96% de su genoma.

Muchos de sus genes sean iguales.

La única diferencia notable, está relacionado con la evolución que ha experimentado cada gato.

Esto en función de su hábitat y sus necesidades específicas.

Estos increíbles descubrimientos, en la similitud genética de los grandes depredadores felinos y de nuestros pequeños gatitos han sido fundamentales.

Han llevado a importantes investigaciones y experimentos genéticos que el hombre ha iniciado hace mucho tiempo, alrededor de los años sesenta.

Entre estas experiencias, encontramos la idea de cruzar espectaculares gatos salvajes con gatos domésticos.

Sin lugar a duda alguien más tuvo el sueño de crear gatos que parecen tigres.

Esto para mejorar y generar razas que aporten la belleza y finura de los tigres con la personalidad pasiva de los gatos.

Aquí están algunas de las razas más famosas, obtenidas por el hombre a través de cruces genéticos, gatos que parecen tigres:

Gato bengalí o bengalcat, gatos que parecen tigres

El Bengala fue la primera raza doméstica con la similitud a un tigre, cobró fama mundial en la década de 1980.

Este hermoso gato es un cruce deliberado del gato doméstico, en particular el Mau egipcio.

Contiene sangre del gato leopardo asiático, un gato que se encuentra en las selvas y bosques del sur de Asia.

La compatibilidad genética es muy alta, lo que hace especial la unión entre estas dos especies.

Genera un cruce eficaz, perfeccionado a lo largo de los años, para llegar al espectacular gato bengalí que conocemos hoy en día.

El gato de Bengala, tiene un aspecto leopardo muy popular y de gran belleza, con pelo corto, manchas oscuras suaves y notorias.

Tiene una musculatura desarrollada que le da agilidad y fuerza, como el gato salvaje tiene en su sangre.

Los bengal además, aunque parezca lo contrario por su genética, es un gato muy social, dependiente y cariñoso.

Estos rasgos han sido claramente modificados durante los años gracias al cruce.

Los maullidos del gato bengalí son únicos y diferentes.

Los bengalíes pueden hacer una mayor cantidad de sonidos y gruñidos que los gatos domésticos comunes, haciéndolo único.

Una maravillosa virtud que comparte con sus padres salvajes, es su gusto por el agua y su habilidad para nadar, ya que en los gatos salvajes.

El agua puede representar deliciosas presas y momentos de caza, el bengalí ha latente este gran instinto salvaje.

Gato Toyger o Toyger cat, gatos que parecen tigres

Otro hermoso gato – el tigre que ahora está en el mundo felino: el gato Juguetero, cuyo nombre especial – «Toyger» –

Proviene de la combinación de dos palabras increíbles que lo describen perfectamente – Juguete – con la palabra – Tigre -, que crea una imagen clara de la pequeña felpa tigre.

El Toyger es una raza de gatos que proviene directamente de los gatos de Bengala.

Se cruza con los gatos domésticos Tabby Mackerel (modelo de color del pelaje de los gatos, que tienen bandas delgadas y muy definidas en el costado del cuerpo).

Este cruce, perfeccionado en los últimos 20 años, ha permitido que esta nueva raza tenga las finas tiras de cebra y el color rojizo que los gatos de Bengala ya tienen en su genética.

Esto genera una apariencia muy similar al color y manchas de los Tigres, aunque no haya sangre silvestre directamente.

Son gatos de tamaño mediano, con pelo corto y muy activo y buena musculatura, a los que les encanta correr, saltar, jugar e incluso correr como un perro.

Tienen que realizar actividades que queman su gran energía y evitan posibles problemas de comportamiento en casa.

Su personalidad es tranquila, dulce y muy amigable, por lo que a menudo se comparan con las cualidades de un perro, por lo que son ideales en hogares que tienen niños, ya que son un compañero increíble para su vida.

Por último, aunque Toyger sigue evolucionando y mejorando, hoy en día esta bella raza tiene la majestuosidad de un tigre, la personalidad amable de un perro y la agilidad y finura de un gato.

Gato Savannah

El gato Savannah es un cruce artificial especial entre un gato doméstico y un serval africano.

El desarrollo de esta nueva raza es el resultado de muchos años de mestizaje con varios gatos domésticos.

Es un gato especial que demuestra el tamaño y la elegancia de un gato salvaje con la apariencia de un guepardo.

Tiene ojos grandes y expresivos, con pelo claro, corto y sedoso y con fuertes espinillas, grandes orejas y largas patas.

El Savannah esa hasta 23 kg y es considerado el gato más grande.

Esta increíble raza es casi nueva, ya que fue reconocida y adoptada por la International Cat Association en 2012, donde fue adoptada por sólo 5 generaciones dependiendo del grado de domesticación.

La dificultad de promoción de los gatos jóvenes y el escaso número de muestras hace que sea el gato más caro del mundo.

Su fuerte genética salvaje, heredada de Serval, nos muestra al savannah como un gato muy activo, que requiere movimientos constantes, saltos, juegos y descanso activo.

Es importante crear un ambiente amistoso y positivo, conocerlo y comunicarse con él constantemente para preservar la domesticación y el carácter de este increíble gato.

En conclusión

Si hiciéramos una comparación, aunque ciertamente depende mucho el gusto de cada persona, podemos destacar la mezcla ideal de factores en un bengal o gato bengalí.

El gato bengali tiene la belleza exótica de un leopardo, un tamaño adecuado, no extremos como los de un savannah.

Los savannah son de gran tamaño y sumado a su hiperactividad suelen volverse un problema en poco tiempo.

Comparando a un gato bengal con un toyger, aunque la diferencia son básicamente el tipo de patrón de pelaje, el de leopardo es mucho más distinto al de un gato común.

No por nada nos hemos enfocado en la crianza y desarrollo del gato bengalí, que tiene muchos factores positivos que ofrecer.

Así que si quieres una experiencia única aquí tienes tres opciones espectaculares.

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