El microchip es un sistema electrónico de identificación de animales, es funcional para gatitos
El dispositivo implantado cumple con la normatividad internacional ISO 11784/85 FDX-B de quince dígitos.
¿Qué es el microchverichip-diagramip?
El microchip está formado por dos partes: una es el microchip en sí y la otra es la cápsula por la que está cubierto.
Esta cápsula es de un vidrio suave y biocompatible (no provoca alergias) y es tan pequeña como un grano de arroz.
El proceso de implantación del chip lo tiene que llevar a cabo un veterinario.
El veterinario introduce la cápsula en el cuerpo del animal, a la altura de la nuca, mediante un inyector (similar a un trocar) que, por medio de un émbolo, la empuja una vez atravesada la piel.
Cada chip almacena un código de números único, vendría a ser como el DNI del animal.
La información relativa al perro o gato queda registrada en línea, se almacena la información relativa a cada chip (el nombre del dueño, su dirección y uno o dos teléfonos de contacto).
Para poner el chip se aconseja esperar a que el animal tenga un mes y medio o dos meses. Después de esa edad, se puede implantar en cualquier Info-registro-canes-Alto_LRZIMA20140709_0003_11momento.
Es importante que los datos proporcionados al veterinario sean exactos, ya que esta información es la que se quedará registrada en la base de datos y la que se utilizará en caso de pérdida del animal.
Si se produjera un cambio de propietario o de domicilio, nos tendremos que poner en contacto con nuestro veterinario, que nos hará firmar los impresos correspondientes para que el cambio figure en la base de datos.
A efectos legales, el propietario del animal es el que figura en esta base de datos y, por lo tanto, es también el responsable de cualquier daño que pueda causar el animal.
Del mismo modo, cuando el animal fallezca, también tenemos que comunicarlo mediante un documento firmado por nuestro veterinario.
¿Para qué sirve el microchip?
A efectos de la ley podemos corroborar sin ningún tipo de problema que somos el titular de nuestra mascota. Es imposible falsear los datos del microchip.
En caso de pérdida del gatito, tanto veterinarios como protectoras y autoridades, mediante un lector, pueden acceder a nuestros datos.
La identificación por chip ayuda a evitar el abandono, ya que la ley castiga con sanciones bastante elevadas a las personas que abandonan o maltratan a un animal.
De esta manera, se puede probar quién es el propietario y responsable legal de un animal maltratado o abandonado.